martes, 17 de abril de 2012

Clandestinidad.

Y mientras desabotonaba tu camisa sin separar mis labios de los tuyos, pensé que aquello me quedaba grande; la cena de esa misma noche en un restaurante con más tenedores que clientes, las veladas en ''Casas de'' con chicas de piernas kilométricas ocultadas elegantemente tras las gasas y el terciopelo de los vestidos largos, chicos con traje y corbata que conducen porsches en vez de motos ensordecedoras y que en definitiva, tienen un rango diferente al mío.

Todo empezó como una diversión de entretiempo, algo para evadir el frío invernal que acosaba a la ciudad; nos conocimos en aquella discoteca de pijos a la que ese día asistía por obligación. Me invitaste a un par de cubatas y me sonreiste con esa sonrisa happydent perfecta.
Te seguí el rollo, total... no tenía nada mejor que hacer.
Pero pensaba que eras un niñato... Eres un niñato.

Tenía simple curiosidad por acercarme a este mundillo tan diferente al mío y que ahora me rebasa.
No soporto que tus ''amiguitas'' se crean superiores por calzar tacones prada y se burlen de mis vaqueros y de mi aro en la nariz. Odio también que me abras las puertas de los locales a los que entramos, que me regales rosas de vez en cuando, que me beses cariñosamente en vez de atarme a la cama y [...] hasta dejarme sin respiración.

Odio tu mundo de chico perfecto.
Sin embargo, aquí estoy, dispuesta otro día más a ser el centro de burla de tus padres y de tu sociedad, a atenerme a tus caricias diarias, a tus mensajes pedantes al móvil y a que esa colosal pantalla plana nos observe cada vez que nos fusionamos.
Pero sobre todo, soportaré cuando intentas dejar de ser quien eres... Cuando sales de casa con el polo lacoste por fuera del pantalón y buscas mi aprobación, cuando sueltas un taco grosero sin venir a cuento y cuando propones ir a botellones.
Ambos sabemos que no eres así... Odio que te ridiculices intentando parecerlo.

Sabes a la perfección que no soy lo que todos, incluso tú, esperan. Me he percatado de tus miradas consternadas cada vez que me recoges para salir y yo me visto de manera tan indomable. Me doy cuenta también de que evitas pasar por sitios determinados para que no me vean contigo.

Pero por otro lado, también he sentido que has querido cogerme de la mano, que me cuidas más de lo que ha hecho nadie, que me escuchas cuando te hablo por más que intente que no lo hagas contándote gilipolleces a las cuales nadie atendería, que aceptes mi manera de ser.  Y lo peor de todo, es que aunque no quieres reconocer que existe un ''nosotros'', lo demuestras con cada acción involuntaria que me diriges.

En definitiva, ambos sabemos que esto es un delirio, un juego prohibido y clandestino que nunca llegará a ser algo más, pero que mientras... ninguno está dispuesto a acabar.

Entretanto, lanzas mi vestido negro al infinito, y te enzarzas en mi cuello como nunca nadie lo ha hecho.
Entretanto, te acarico la espalda desnuda como nunca nadie lo ha hecho.

Así que tu habitación, lejos de ser cálida y acogedora, sería testigo, otra noche más, del delirio de nuestros gemidos.

miércoles, 8 de febrero de 2012

Odio.

Es una mala costumbre escribir solamente acerca de todo lo que nos agrada... ¿No será más útil hacerle saber a la gente lo que detestamos? Veamos, a mí me encantan los espaguetis y detesto la verdura. Si voy a casa de una amiga a comer, prefiero que no me ponga verdura, a que me ponga espaguetis en especial, es decir, prefiero que sepa que odio esa comida verde que parece de conejo a que adoro la pasta.
Por ello, he querido innovar y en vez de escribir todo lo súpermegachachipiruleta, voy a hacerlo sobre la parte oscura de nosotros mismos... Sobre todo lo que nos disgusta (en este caso a mí)

Odio los números. Sí, los odio. Son tan mecánicos, tan iguales... tan aburridos, pero a la vez infinitamente tan combinables y diferentes...! Las letras sin embargo, pueden decir mucho de una persona... cada uno tiene su forma de escribir, sus propios carácteres.. Los números no: 1 2 3 4 5 6 7 8 9 0, invariables completamente. Y ya ni te cuento, cuando los mezclamos con símbolos y letras del abecedario griego. Sí, definitivamente odio los números.

Odio los tirantes de silicona de los sujetadores. Es más, odio que las chicas se los pongan para enseñarlos... No entiendo como no se percatan de que son sumamente antiestéticos. ¡Y no hablemos de las que se lo colocan en la espalda justo por debajo del cuello! Genial la moda de llevar las tetas como colgantes sí.

Odio el maquillaje. Sí, seré una hipócrita y todo lo que queráis ya que lógicamente también me maquillo. Ahí está el problema... hay que aprender a diferenciar entre ''maquillar'' y ''pasar la brocha''. Es horrible acercarte a una chica joven y comprobar como una masa de pintura le cubre el rostro. Una vez me dijeron que ''el maquillaje estaba para eso, para enseñarlo''.  ¿Para enseñarlo? ¿PARA ENSEÑARLO? No comments. Pues eso... una chica es bonita cuando los demás la aprencian tal y como es.

Odio el tabaco. Puede conmigo, sí... Es algo repugnante. No se merece ni que siga escribiendo.

Odio los machistas. Los que se creen más listos que nadie, que el deporte es cosa de hombres y que las mujeres tenemos que hacer todas las tareas de casa. WTF? Ding dong!! Despiertaa!! Vivimos en el Siglo XXI !! Un pedazo copón en la nuca y se les quitaba la tontería.

Odio las ''mentes ultraliberales''. ''Todos con todos, tú con mi chico, yo con tu gato, ella con mi abuela, tu primo con mi hermano  mientras se coloca con pegamento y a la semana nos los intercambiamos porque somos el futuro, y el futuro tiene que ser liberal, sin orden, nosotros mandamos en nuestro propio cuerpo y con él hago lo que me da la gana'' ¿En serio creéis que la sociedad iba a funcionar así? No critico ni mucho menos la libertad de uno mismo, pero de ahí a innalar cristal en polvo hay un pasico grande no?

Odio la política. No se estudia la mejora del país, sino la manera de joder al otro partido político. Vamos a ver, ¿no conocemos la palabra ''cooperar''? En fin.

Odio no tener razón. Es cierto, a veces tenemos una discusión con alguien y llevamos al límite nuestra opinión hasta que nos damos cuenta de que sí, de que estamos equivocados. Agg. Odio reconocer que no tengo razón, aunque lo haga, no lo aguanto.

Odio las sonrisas hacia afuera, las que por dentro no lo son. Sé como se siente cuando en tu boca colocas esa sonrisa... Y no, no es agradable saber que los demás se están divirtiendo y tú estás llorando sin que nadie lo note, sin que nadie se percate de que tras esa sonrisa sólo hay lágrimas. Odio tener que sonreir así.

Odio la gente que se cree graciosa. Esos que hacen un comentario, se ríen, miran a todos los de alrededor para ver si se están riendo con él y a ti solamente te dan ganas de decir: ''chato, tienes la gracia en el culo"

Odio las canciones tristes. Pero joder, no puedo evitar escucharlas. Aunque si sabes que lloras con la BSO de pearl harbor, ¿por qué coño le das a repetir en tu lista de reproducción una y otra vez?

Odio que me encanten tanto las cosas... ¿Por qué? Pues porque cuando me depecionan (que siempre lo hacen) me muero por dentro. Sufro. Pero no por ello dejan de gustarme.
Un ejemplo... tú.
Te he deseado, querido, amado o como quieras llamarlo, lo he hecho tanto; que ahora que me has decepcionado he decidido apuntarte en mi lista de cosas tan estúpidas como relevantes para haber pensado en ellas.

sábado, 4 de febrero de 2012

El amor no es nada



El amor, el amor no es nada.
Simplemente es locura...
Pasión, cariño y ternura.
El amor son caricias, caricias y miradas.
.
El amor, el amor no es nada.
Sólo lágrimas de amargura,
que un beso siempre cura,
cuan sendos caminos se distancian.
.
Corazones que palpitan,
corazones que delatan,
sentimientos que desgarran
un te quiero, una sonrisa.
.
Esa brisa que florece,
en esos días de verano,
luego una distancia que entristece
y un ''¿sabes? te estaré esperando''
.
Mil recuerdos se disparan,
lluvia sobre los rostros,
el último beso con los ojos,
mil cuchillos que se clavan.
.
Y un adiós que despedaza,
vivir un año separados,
delirio en la mirada desolados,
extrañándose cada día.

Pero las golondrinas han regresado,
el sol alumbra de alegría,
un reencuentro deseado,
y un abrazo de por vida.
.
Entrelazados entre sonrisas,
caminan por la playa,
han de hablar de tantas cosas,
que a contemplarse se limitan.
.
Frenesí al fusionar sus miradas
un destino alborozado
dos corazones extasiados,
y el amor.. el amor, que no es nada.

Blanca CB

sábado, 14 de enero de 2012

Cállame con un beso si.

Quiero que con un beso me hagas callar, quiero que me mires y que a uno de los dos se le escape una pequeña risa que estropee el momento pero que a la vez lo haga más especial, quiero que me abraces y que me digas lo importante que soy para ti, que cuando tengamos alguna pequeña discusión al final todo se resuelva y todo quede en eso. No pido cosas imposibles, solo disfrutar de cada día que pasemos juntos sea único e irrepetible, que hagamos de cada momento una experiencia nueva e inolvidable. Quiero que estés a mi lado para siempre, que nunca me dejes. Tú y yo para lo bueno y para lo malo, para los dias nublados y los soleados, para todo y para siempre...